Estudios de Historia Moderna y Contemporánea de México

LA DECENA TRÁGICA:
UNA VERSIÓN PERIODÍSTICA ALEMANA[ 1 ]

Jesús Monjarás-Ruiz


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El material aquí presentado proviene del Kölnische Zeitung editado en la ciudad de Colonia (República Federal Alemana) por Walter Jacobs et al., y es parte de un trabajo mayor encaminado a mostrar la visión que este periódico ofreció al público alemán de los sucesos ocurridos en México desde la renuncia de Porfirio Díaz hasta los asesinatos de Madero y Pino Suárez. Esto es, la caída formal de la dictadura y el desarrollo y fin del gobierno maderista.

El publicar estos materiales obedece a que, independientemente del análisis que de ellos pienso hacer más adelante, considero una obligación ponerlos a disposición de los estudiosos del problema. Como lo indica el título, se trata únicamente de la primera parte de la fase final del gobierno maderista, el golpe de Estado efectuado por una facción del en ese momento aún intacto ejército porfirista. Formalmente el material consta de 116 comunicados, variables en cuanto a contenido y extensión, en su mayoría telegramas enviados al Kölnische Zeitung por las grandes agencias informativas desde diferentes lugares: México, Estados Unidos de América y algunas ciudades alemanas. Temporalmente abarca del 17 de octubre de 1912 al 19 de febrero de 1913. O sea desde el levantamiento de Félix Díaz en Veracruz ("Presagios"), hasta el fin de la llamada Decena Trágica ("La tormenta") la mayor parte corresponde a la segunda parte. Lo anterior no significa que la información cubra todos los sucesos ocurridos en ese lapso, dado que una de las características del material periodístico, cuando menos del que he trabajado, es dar la información a "saltos".

Esta discontinuidad se explica si tomamos en cuenta que la atención de los periodistas alemanes se concentra en los momentos críticos de nuestra historia, básicamente los conflictos armados o las grandes calamidades, lo que implica vacíos informativos. Así, no contamos con noticias referentes al gobierno de Madero pero, en cuanto surge alguna rebelión o disturbio el periódico se ocupará del asunto. Este procedimiento evidentemente proporcionó una visión muy particular de México a los lectores del Kölnische Zeitung, tendencia que, en términos generales, continúa hasta nuestros días.

Por el momento en la presentación de los documentos me concretaré a señalar los aspectos que me parecieron más importantes ya que, como anoté arriba, queda para otra ocasión el análisis global de la imagen que de Madero presentó el Kölnische Zeitung. En "Presagios" en un principio se ofrece una visión positiva de Félix Díaz, a quien se llega a ver como continuador y, hasta cierto punto, vengador de su tío; posible salvador del país que se lanzó a la guerra sólo con el fin de conseguir la paz. Sin embargo, ante la falta de logros, dicha imagen se irá deteriorando hasta convertir al "salvador" en un mero aventurero. Al enfriarse el entusiasmo por el fallido primer intento de sublevación de Félix Díaz el asunto se manipulará de tal forma que incluso se llegará a presentar como una maquinación maderista. En relación con Alemania es posible percatarse de las relaciones comerciales que sostenía con México y, según se infiere, es evidente que el grupo alemán residente en ese tiempo en el país era numeroso. En contraste con las frecuentes noticias sobre daños a los norteamericanos o a sus propiedades, cuando se informa sobre la situación de los alemanes se dice que ni ellos ni sus pertenencias han sufrido perjuicios.

Entre líneas se hace patente la injerencia de potencias extranjeras destacando la de los norteamericanos mediante las presiones diplomáticas o militares que, en cuanto al bloqueo de puertos u ocupación de territorios, también implicaban aspectos económicos.

Se hace evidente la incapacidad del gobierno maderista para combatir a los zapatistas; aunque sin percatarse claramente de la situación, dejan ver la "independencia" de éstos respecto al desarrollo del problema al tiempo que hacen patente la inestabilidad de la situación político-militar en el país.

Los periodistas alemanes, al analizar el levantamiento de Veracruz, ven la situación problemática pero no crítica, sobre todo no creen que afecte sus intereses comerciales, los cuales representan su preocupación principal. Para ellos las noticias aparecidas en los periódicos norteamericanos son, en general, sensacionalistas e irresponsables. Desde su punto de vista estudian la situación y objetivamente -según ellos- hacen ver cómo resultaría más barato para los norteamericanos "conquistar pacíficamente al país".

En "La tormenta" las informaciones se refieren básicamente a las acciones militares y a las repercusiones que tuvieron para la población civil, especialmente para los extranjeros. Los destructivos efectos de la artillería y las armas automáticas ejercen una "fascinación aterradora" en los periodistas. En este caso la rebelión se presenta como resultado de un movimiento porfirista que, en el fondo, no será sino una lucha por el poder en la cual queda muy clara la no intervención del pueblo, mismo que permanecerá expectante para, ante los hechos consumados, definir su posición, situación que ven como regresiva.

En cierta forma dan a entender que una vez desaparecido el "viejo león" quedaron muchos cachorros con ganas de apoderarse de la mesa que había dejado puesta y servida; en las opiniones alemanas siempre estará presente la sombra de Porfirio Díaz.

Los informes son incidentales, reiterativos, contradictorios y claramente favorables a Félix Díaz y sus seguidores; sin embargo, conforme avanzan los sucesos, se observa una mayor definición de los actores y de la situación. El punto central son los intereses extranjeros, básicamente los norteamericanos.

La imagen que se ofrece de Madero es negativa, principalmente le echan en cara su nepotismo, su falta de energía y el no haber sido capaz de implementar una política definida. Al adelantar acontecimientos, por ejemplo, la renuncia de Madero -aun antes de que se definiera la lucha- dejan entrever que ¿merced a los informes de Wilson? de antemano se sabía el resultado.

Desde mi punto de vista, aunque los periodistas alemanes muestran hostilidad hacia los norteamericanos, en el fondo tienen la misma actitud neocolonialista que combaten; siempre y cuando otros (¿ellos?) fueran los actores. En suma, se puede decir que nos encontramos ante una visión externa condicionada por los sucesos europeos y por los intereses alemanes la cual, a pesar de implicar una deformación, seguramente puede ser aprovechada.

"PRESAGIOS". UNA CONTRARREVOLUCIÓN PORFIRISTA EN MÉXICO

De acuerdo con un telegrama procedente de la ciudad de México, el general Félix Díaz, sobrino del antiguo presidente, tomó Veracruz. [Félix] Díaz hizo aprehender al director del arsenal y al comandante de la guarnición, sin embargo, más tarde los dejó en libertad bajo palabra de honor.

Dos cañoneras ancladas en el río no presentaron ninguna resistencia al avance del general. Los negocios se encuentran cerrados. Los vecinos le tributaron un entusiasta recibimiento a [Félix] Díaz.[ 2 ]

México, 17 de octubre. El presidente Madero ordenó que todas las tropas, sean regulares o irregulares, se unan para sitiar Veracruz a fin de someter al general Félix Díaz, a quien el gobierno considera el más peligroso de los rebeldes.[ 3 ]

Nueva York, 17 de octubre. Según un comunicado de México, Veracruz se encuentra totalmente aislada, excepto por agua. El gobierno le pidió a los ferrocarriles que retiren todo su material destinado a la construcción de nuevas estaciones terminales en Orizaba, Jalapa y Tierra Blanca. Ningún tren circulará más allá de las líneas de las tropas gubernamentales. 125 soldados federales de Orizaba, los cuales tuvieron un encuentro con una avanzada de los rebeldes, al sur de dicha ciudad, de inmediato se unieron a ellos. El bloqueo al general [Félix] Díaz depende de la fidelidad de las cañoneras.[ 4 ]

Washington, 17 de octubre. El levantamiento del confederado general Félix Díaz y la toma de Veracruz son los sucesos más importantes de todo el movimiento antimaderista. [Félix] Díaz es muy apreciado entre los militares y el pueblo. Como presidente seguramente sería muy aceptable. Orozco debe encontrarse en camino para ofrecerle sus servicios y las tropas del norte a [Félix] Díaz. Un comunicado del New York Herald dice que [Félix] Díaz se colocó a la cabeza debido a la presión de los mejores elementos del ejército y a la de casi todos los revolucionarios, a fin de reestablecer la paz, la cual, en un desgraciado momento, ha sido rota por personas ambiciosas y desconsideradas. Él dejará el gobierno al hombre que el pueblo desee.[ 5 ]

Nueva York, 17 de octubre. Desde México se informó que el rebelde general [Félix] se apoderó de las municiones destinadas al gobierno que llegaron a bordo de un vapor alemán. [Félix] Díaz y Orozco desean hacer causa común.[ 6 ]

Londres, 18 de octubre. La compañía mexicana de ferrocarriles recibió de su director general el siguiente telegrama: Veracruz fue, hoy en la mañana (16 de octubre), tomada sin resistencia por el general [Félix] Díaz. Las tropas federales, la flota y la policía se pasaron a su lado. La ciudad está tranquila.[ 7 ]

Washington, 17 de octubre. El crucero [norte]americano Des Moines recibió órdenes de, a toda máquina, trasladarse de Progreso a Veracruz, a fin de proteger los intereses [norte]americanos. El capitán recibió poder para actuar según su criterio y puede, si lo considera necesario, desembarcar marineros.[ 8 ]

Washington, 21 de octubre. La carbonera Brutus recibió órdenes de trasladarse de Keywest en Florida a Guantánamo en Cuba a fin de embarcar provisiones y carbón para los cruceros [norte]americanos Tacoma y Des Moines, los cuales se encuentran en la costa este de México. Lo que ha sido tomado como signo de que los Estados Unidos [de América] tienen la intención de que sus barcos de guerra permanezcan por algún tiempo en aguas mexicanas.[ 9 ]

México, 22 de octubre. El embajador alemán Von Hintze ha investigado personalmente la situación en Veracruz y ha preparado al vapor Steigerwald de la línea Hamburg-Amerika para el embarque de los alemanes que busquen refugio. El puerto de Veracruz ha sido declarado formalmente cerrado; sin embargo, los vapores navegan frecuentemente. El bombardeo de la guarnición de los rebeldes en el fuerte Ulúa efectuado por los barcos de guerra fieles al gobierno no amenazó ni la vida ni las propiedades de los alemanes.[ 10 ]

Nueva York, 22 de octubre. Un telegrama procedente de Veracruz informa que el comandante de las tropas federales prometió no atacar la ciudad antes de 24 horas, a fin de darle oportunidad a los extranjeros de ponerse a resguardo. El capitán del crucero [norte]americano le comunicó a [Félix] Díaz, jefe de los rebeldes que, en caso de que en su avance rompa su promesa de observar las leyes internacionales, él lo tomará como un acto hostil a los Estados Unidos [de América]. Uno de los muelles del puerto fungirá como zona neutral para la protección de los empleados extranjeros de las casas comerciales, dicho muelle será puesto bajo el mando del capitán del vapor [norte]americano Segurança. El vapor alemán Steigerwald aceptará extranjeros a bordo.[ 11 ]

Nueva York, 24 de octubre. De acuerdo con un telegrama enviado desde México, el gobierno ordenó que el general [Félix] Díaz y los oficiales apresados en Veracruz sean juzgados y sentenciados por un tribunal militar. Probablemente todos serán fusilados. De los soldados uno de cada diez será fusilado. Según un telegrama procedente de Veracruz, el número de muertos y heridos resultante de la lucha de ayer no llegó a cien. La esperada batalla no tuvo lugar, en su lugar reinó la confusión general. Los rebeldes y las tropas federales se toparon en las calles pero nadie sabía a qué partido pertenecía el otro ya que los uniformes eran los mismos.[ 12 ]

Washington, 25 de octubre. Según informes de México, el pronunciamiento de los partidarios de [Félix] Díaz fue una trampa preparada por Madero. [Félix] Díaz hace ya bastante tiempo que era visto como sospechoso; por ello se le hizo creer que la mayor parte del ejército seguiría su bandera. No fue sino hasta que sus tropas se negaron a disparar que, desde luego demasiado tarde, se dio cuenta del garlito.[ 13 ]

Washington, 29 de octubre. De acuerdo con un comunicado recibido aquí, el cónsul belga fue apresado en Mérida (Yucatán), presumiblemente bajo sospecha de haber apoyado a los rebeldes. Se espera que el Departamento de Estado, a petición de Bélgica, le encargue al cónsul [norte] americano en Mérida las averiguaciones sobre el asunto. El fracaso del levantamiento del general Félix Díaz parece no haber paralizado las actividades de los insurrectos del sur de México. En el norte la situación está anormalmente tranquila.[ 14 ]

Los Estados Unidos [de América] contra México

Washington, 20 de diciembre. El Washington Post informó que las relaciones con México se encuentran próximas a romperse. Taft le envió ayer una nota a Madero, la cual se diferencia de un ultimátum sólo por la omisión de la fecha. En caso de que, para el 1o. de enero, no se reciba una contestación satisfactoria Taft pedirá al Congreso el avance sobre México. Inmediatamente se levantará la neutralidad para, de esta forma, derribar al gobierno de Madero. Si lo anterior no surte efecto, los puertos mexicanos serán bloqueados y probablemente se invada y ocupe una parte de México.[ 15 ]

Washington, 20 de diciembre. El embajador en México, Wilson, sale hoy para dicho país. Consigo lleva una exigencia del gabinete, elaborada en colaboración con el presidente Taft, por medio de la cual se le pedirá al gobierno mexicano que tome las medidas necesarias a fin de que, sin demora, se ponga fin a los disturbios en México. Se cree que dicha petición fue motivada por las gestiones de las potencias extranjeras ante la destrucción de las propiedades de sus ciudadanos.[ 16 ]

Desde México

En contra de los sensacionalistas e irresponsables periódicos [norte]americanos -los cuales han anunciado una inminente intervención de los Estados Unidos [de América] en los desórdenes mexicanos con todas las dañosas consecuencias para los extranjeros residentes en dicho país-, una importante empresa alemana establecida en México puso a nuestra disposición un informe del director de su agencia en dicho país, la empresa se hace responsable de la veracidad del informe, del cual tomamos lo siguiente:

México, 3 de diciembre. Por el momento la revolución contra el presidente Madero se limita a un grupo de bandas armadas las cuales vagabundean por diferentes partes de la república, saquean granjas solitarias, destruyen tramos desprotegidos de vías férreas e interrumpen el tránsito en lo posible. Debido a lo extenso del país, a lo escabroso del terreno y a la falta de suficientes y bien artilladas tropas, resulta extremadamente difícil para el gobierno el sofocar por completo esta pequeña guerra de guerrillas. Por lo anterior tenemos que contar con que la inseguridad que reina en el momento dure aún bastante tiempo. Tampoco se puede descartar el que se hagan otros intentos para derrocar a Madero; sin embargo, todos los realizados han sido vanos hasta el momento. El que los Estados Unidos [de América] se mezclen con las armas en la mano en los asuntos mexicanos, eso, en general, se ve aquí todavía muy lejano. Pero, incluso si se llegara a producir un tal ataque, eso nunca representaría un peligro para los buques mercantes. México no posee una flota de guerra, propiamente sus puertos están desfortificados. O sea que no se produciría un bloqueo ni tampoco se colocarían minas que pudieran amenazar el tránsito de los buques mercantes. En caso de que los Estados Unidos [de América] ataquen, simultáneamente aparecerán sus barcos en los diferentes e indefensos puertos y desembarcarán sus tropas. A un ataque de esta naturaleza México puede presentarle tan poca resistencia como a una invasión en la frontera norte. Por supuesto que la ocupación militar del país, sea por tierra o por mar, debe tener lugar al mismo tiempo y sobre todo debe obtener un éxito rápido ya que de otra forma, en el interior del país, se pondrían en peligro no sólo las vidas de los [norte]americanos, sino las de todos los extranjeros. Empero, para los Estados Unidos [de América] es mucho más segura y barata la conquista pacífica del país.[ 17 ]

Durango, 4 de diciembre. El gobernador de nuestro estado, ingeniero Patoni, después de apenas cuatro meses de gobierno, dimitió de su puesto pues ya no sabía cómo, con la caja vacía, combatir los múltiples levantamientos que ocurren en todo el estado. El ministro Jaime Garza, originario de Durango, ha asumido interinamente el puesto: es el séptimo gobernador en dos años. Tres grandes haciendas que sólo contaban con pequeñas guarniciones fueron destruidas en una semana, los defensores murieron a manos de los rebeldes. Cerca de la hacienda Juan Pérez, a poca distancia de la ciudad de San Juan de Guadalupe, el tristemente célebre "batallón de la muerte" fue cercado en la cañada del mismo nombre y en su mayoría pasado a cuchillo. Oficialmente se informó de un triunfo de las tropas federales debido a que sus enemigos, la gente de Cheche Campos, deben haber optado por la retirada. Sin embargo, según informes proporcionados por habitantes de la hacienda, el número de los voluntarios masacrados fue estimado en 200. También renunció Flores Magón ministro del Interior. Él intervino, de una manera muy brusca, en una justificación pública que de sus actos y sobre todo de los de su hermano hizo el presidente. Un primo de los Madero, el licenciado Hernández, anterior ministro de Agricultura, se hizo cargo del Ministerio del Interior.

A partir del 1o. de enero se elevarán un 20% todos los impuestos de importación. Un acontecimiento muy favorable lo representa el que, pese a la destrucción de cosechas completas de buena calidad debido a la guerra, las inundaciones y otras causas, la cosecha de este año de los principales productos alimenticios -maíz y frijol- será la mejor desde hace seis años.

En el sur, donde para combatir a los rebeldes se solicitaron 3 000 hombres de Chihuahua, las tropas federales destruyen los poblados respetados por los zapatistas ya que los consideran morada de rebeldes. Según informes no desmentidos, en 10 días deben haber sido arrasados 25 pequeños pueblos. No obstante, el gobernador de Chihuahua (al norte del país) solicitó 10 000 hombres más para limpiar el camino. En Oaxaca volvió a estallar la revolución. Sobre el proceso contra los asesinos de Covadonga ya no se oye nada.[ 18 ]

Nueva York, 10 de enero. Desde la ciudad de México oficialmente se informó que: el jueves (posiblemente el 2 de enero) los rebeldes atacaron y destruyeron la ciudad de Ayotzingo, situada a 25 millas de la capital. De los 18 hombres que componían la guarnición sólo sobrevivieron 2, los demás resultaron muertos. 20 hombres de las tropas federales enviados para su protección fueron apresados al igual que otros 100 enviados de México. Los efectivos de los rebeldes fluctúan entre 500 y 1 000 hombres. Los habitantes de Ayotzingo se encuentran sanos y salvos. El gobierno envió refuerzos a toda prisa.[ 19 ]

México, 3 de febrero. Ayer en la noche partidarios de Zapata saquearon un tren de pasajeros como a 30 millas al sur de la ciudad de México. Hicieron descarrilar el tren y después dirigieron sus disparos al vagón en que se encontraba la escolta del tren. De los 20 miembros de la escolta 12 resultaron muertos y los demás heridos. Los asaltantes también mataron a cuatro pasajeros y se llevaron consigo a muchas mujeres. Hoy un tren de rescate llevó a los heridos a Amecameca.[ 20 ]

Washington, 5 de febrero. La aclaración del antiguo embajador mexicano Calero de que, en favor de los intereses mexicanos, mintió durante seis meses al gobierno [norte]americano cuando presentó a la revolución como un asunto sin importancia, no encontró ninguna réplica en los círculos oficiales de aquí ya que cualquiera sabe que dicha revolución no terminará mientras Madero permanezca en su puesto. Sin embargo, de lo anterior se desprende que nunca se le dio importancia a las afirmaciones de Calero, sino que más bien se confió en los informes de los propios funcionarios; política que se seguirá. Los últimos informes señalan que la situación en México empeora día con día.[ 21 ]

"LA TORMENTA". LA CONTRARREVOLUCIÓN EN MÉXICO

Ante la conflagración que desde los Balcanes amenaza con incendiar a toda Europa y, en vista de las nubes de tormenta que se acumulan en el Asia Media, el interés de los políticos en los países hispanoamericanos ha menguado por algún tiempo. Sin embargo, ahora nos llega la noticia de un nuevo levantamiento general de los centroamericanos contra los todo absorbentes yankees, la de la amenaza de una guerra del hule entre Bolivia y Perú y la de un nuevo movimiento subversivo en el desgraciado México. Desde 1877 forzado, en contra de sus deseos, a la tranquilidad por el enérgico Porfirio Díaz y agraciado con la bendición de la paz, México, desde los inicios de 1911 [sic] se rebeló en contra de los protegidos del envejecido presidente. De entre los muchos insurrectos triunfó el incapaz Francisco Madero. Después de la renuncia voluntaria de Porfirio Díaz (25 de mayo de 1911), mediante la cual éste deseaba evitarle a su madre patria las atrocidades de una guerra civil, Francisco I. Madero[ 22 ] -que había sido elegido presidente el 2 de octubre- entró en noviembre a la capital mexicana. De antemano se esperaba lo peor de él. Sin embargo, un saqueo tal del país en favor de intereses puramente familiares, acompañado de la oclocracia en perjuicio de la gente decente, eso aún no se había visto en la historia. Todavía se encuentra fresco en todas las memorias el caso de Covadonga, en relación con el cual el gobierno alemán -a pesar de los celosos cuidados de nuestro embajador vicealmirante Von Hintze- sólo ha recibido promesas en el papel, en tanto que los asesinos de los cuatro alemanes no han sido ajusticiados hasta la fecha. Los criminales y sus amos fueron precisamente aliados de Madero. La familia y la plebe de los Madero tuvo que conducir a una reacción. Lo que extraña es, en todo caso, que dicha reacción se haya producido tan tarde y que al principio sólo haya sufrido fracasos. Las gracias de ello se las deben los Madero a que el ininterrumpidamente postergado ejército federal -en favor de sus bandas de asaltantes- y sus oficiales únicamente viven para cumplir con su deber y no para inmiscuirse en la política. La reacción en contra de Madero debería vincularse necesariamente a la renaciente y creciente popularidad del desterrado Porfirio Díaz. Con ello se convertiría en cabeza de la reacción también un Díaz, Félix Díaz, sobrino del antiguo presidente. Un primer intento en octubre del año pasado, después de un comienzo exitoso, terminó con su apresamiento en el puerto de Veracruz. Sin embargo, ahora las tropas de la capital han liberado a [Félix] Díaz y al también prisionero general Bernardo Reyes, antiguo ministro de Guerra del presidente [Porfirio] Díaz. El general Reyes, quien desde los últimos tiempos de Porfirio Díaz tomó parte en los disturbios -desempeñando un papel ambiguo y sirviendo únicamente a sus intereses personales- cayó en la lucha. Entretanto Gustavo Díaz [sic] un hermano de Francisco, ministro de Hacienda, organizador del imperio familiar y del despojo de tierras, o ha escapado o se encuentra en manos de los rebeldes. El presidente Francisco Madero se halla, junto con su gabinete, cercado en el Palacio Nacional, tal vez incluso en este momento ya esté en poder de los porfiristas. De cualquier forma el dominio de Panchito,[ 23 ] a quien desde el principio nadie tomó en serio, se ha terminado.[ 24 ]

Como complemento de los comunicados aparecidos hemos recibido los siguientes telegramas:

Nueva York, 9 de febrero. De acuerdo con una comunicación de México (13 horas) Félix Díaz realmente domina la situación, después que la artillería y la mayor parte de las tropas se pasaron a su lado. [Félix] Díaz y sus partidarios se apoderaron del arsenal. Las tropas gubernamentales opusieron resistencia durante algún tiempo, después los rurales y la policía montada se pasaron del lado de Díaz. El general Bernardo Reyes cayó en la lucha.[ 25 ]

Washington, 9 de febrero. La noticia sobre el apresamiento del presidente Madero aún no ha sido confirmada por el Departamento de Estado a las 3 de la tarde de hoy (9 de la noche en Alemania.) Las primeras noticias provenían de fuentes no oficiales. El embajador [norte]americano en México -cuyos informes ha firmado el secretario de Estado Knox quien se encuentra en dicho lugar- recibió tres telegramas al respecto. Más tarde llegó otro al Departamento de Guerra. Félix Díaz debe estar muy seguro de las tropas federales. Gustavo Madero, hermano del presidente, debe haber escapado. Las noticias proceden de Veracruz. Cerca de las 8 de la noche (2 de la mañana en Europa) se recibió un informe según el cual Gustavo Madero debe estar preso en tanto que Francisco debe encontrarse libre. Parte del ejército se rebeló y se pasó a las filas de Félix Díaz; después las tropas amotinadas lo liberaron de la cárcel al igual que al general Bernardo Reyes. Reyes, al abandonar la prisión, resultó muerto en la lucha contra las tropas fieles al gobierno. Oficialmente aún no se dan a conocer los hechos.[ 26 ]

Nueva York, 10 de febrero. En verdad todas las tropas de la capital, incluyendo a la artillería, se pasaron al lado de [Félix] Díaz. Según parece los rebeldes tienen la supremacía en la ciudad de México.[ 27 ]

México, 10 de febrero. Después de prolongadas luchas callejeras el gobierno ha procurado, en parte, la supremacía. Hasta ahora deben haber muerto cerca de 150 hombres. En el bando gubernamental cayó el general Villar; por poco tiempo Madero comandó las tropas fieles a su gobierno. La mayor parte del ejército parece haber permanecido leal al gobierno. La actitud de la artillería es ambigua. El gobierno se ha posesionado nuevamente del Palacio Nacional. Los rebeldes liberaron a Félix Díaz y al general Bernardo Reyes.[ 28 ]

México, 10 de febrero. De acuerdo con los últimos telegramas recibidos de México, el presidente Madero y los ministros de su gabinete todavía se sostienen en el Palacio Nacional, en cuyos alrededores se desarrollan las más sangrientas luchas. Entre los heridos también se encuentra el ministro de Guerra, general Gregorio Ruiz, dos personajes importantes y tres tenientes que fueron heridos de muerte en la guardia de palacio. Según otro informe, deben haber caído bajo las balas de sus propios soldados debido a que trataron de evitar que la tropa se uniera a los rebeldes. [Félix] Díaz pudo tomar el arsenal sólo después de vencer una feroz resistencia. También se recibieron informes de rebeliones en otros lugares.[ 29 ]

Nueva York, 10 de febrero. Junto con el presidente Francisco Madero también fueron cercados los miembros de su gabinete en el Palacio Nacional. Únicamente cuatro batallones permanecieron fieles a Madero. Tanto su destino como el de su gabinete son dudosos. El comandante de los insurrectos es Félix Díaz, uno de los sobrinos del desterrado presidente Porfirio Díaz. Félix Díaz ya le hizo llegar a Madero el requerimiento de rendición. En las cercanías de la capital acampan varios miles de zapatistas sin decidirse a entrar a la ciudad. Se espera la respuesta del ultimátum de Félix Díaz, entre tanto se han recibido noticias de levantamientos en los más diversos lugares, lo que muestra que la situación del gobierno es insegura en extremo. Madero ocupó todo el domingo (día y noche) básicamente en reunir a sus fieles, cuyo número se calcula muy bajo. 200 de sus hombres murieron en el Palacio Nacional el domingo, entre ellos muchos civiles. Madero escapó de morir por un pelo, pero no así el soldado que se encontraba a su lado. Cientos de heridos llenan los hospitales.[ 30 ]

Nueva York, 9 de febrero. De acuerdo con un telegrama procedente de Washington, aparecido en el New York Herald, el gobierno hace preparativos para enviar barcos de guerra a México. Según otro telegrama recibido desde México por el mismo periódico, la calma se reestableció ya muy entrada la noche.[ 31 ]

México, 10 de febrero. Félix Díaz, quien el domingo aún era un prisionero político condenado a muerte, es el que ahora domina la situación en México, en su poder tiene cuatro arsenales y fábricas de pólvora. Madero estuvo sitiado en el Palacio Nacional hasta las 10 de la noche hora en que abandonó dicho lugar en compañía de los ministros. Su familia huyó a la embajada japonesa. En los círculos diplomáticos ya antes se comentaba abiertamente como un hecho el que Madero sería incapaz de proteger a los extranjeros con las fuerzas a su disposición. Se dice que Díaz presentó su ultimátum a Madero de tal forma que le hacía saber que, en caso de que no se rindiera, haría saltar el palacio por los aires. La ciudad se encuentra tranquila, sin embargo en la noche del domingo deben haber muerto 250 personas y varios cientos deben haber resultado heridas. De acuerdo con informaciones tardías, Madero y su familia recibieron la noticia de que el general Blanquet había arribado con nuevas fuerzas pero que se negaba a luchar en contra de [Félix] Díaz y que debe haberse retirado hacia la costa occidental. Los puentes entre la ciudad de México y la de Toluca fueron incendiados. El hijo del general Reyes, Rodolfo Reyes, se suicidó por el pesar que le causó la muerte de su padre.[ 32 ]

El domingo sangriento en México

Nueva York, 10 de febrero. Según noticias recibidas desde la capital mexicana, los porfiristas -esto es los partidarios del presidente Porfirio Díaz desterrado en 1911- prepararon desde hace meses el levantamiento en contra del actual presidente, Francisco Madero. Aunque sus planes no estaban aún maduros del todo, ayer se vieron obligados a actuar debido a que el gobierno se había enterado de ellos y planeaba el arresto del dirigente. En la noche del sábado al domingo Francisco I. Madero reunió a sus partidarios. Sin embargo, ayer no se encontraba en el Palacio Nacional cuando, en la mañana, dicho lugar fue atacado con éxito. Los combates duraron 15 horas. El número de heridos fue estimado en más de mil. La lucha más feroz se libró en la plaza del Zócalo, frente al Palacio Nacional. Allí se encontraban revueltos tres mil espectadores entre hombres, mujeres y niños, algunos de ellos resultaron muertos desde los primeros cañonazos de los rebeldes. Pronto el Zócalo se convirtió en un mortal baño de sangre ya que la masa, paralizada por el miedo, fue incapaz de huir y la plaza del Zócalo quedó exactamente en medio del fuego de artillería de los defensores de palacio y del de los rebeldes. Después de dos horas el Zócalo ofrecía un espectáculo aterrador. Los cuerpos de los muertos y los de los heridos formaban altas pilas; mujeres heridas en el vientre clamaban a los santos; los hombres morían con una maldición entre los labios; la caballería galopaba entre muertos y heridos. Todavía mucho después de haberse terminado la lucha el personal de las cruces roja y blanca, médicos y enfermeras, sacaban muertos y heridos del Zócalo.[ 33 ]

Nueva York, 10 de febrero. De acuerdo con un informe de Washington, Taft ha corroborado nuevamente su política de no intervención en México con el fin de dejarle libres las manos a su sucesor Wilson. Desde la ciudad de México se dijo que la revolución estalló simultáneamente en Zacatecas y en Oaxaca. Los partidarios de [Félix] Díaz dominan tanto la ciudad de Pachuca como muchas otras ciudades pequeñas. En la última noche (la del domingo al lunes) en las calles reinó un silencio de muerte. Los informes sobre la llegada de rebeldes bajo el mando de Zapata continúan.[ 34 ]

La contrarrevolución en México

Berlín, 10 de febrero. El embajador mexicano recibió hoy al medio día el siguiente telegrama del ministro del Exterior en México: "En la ciudad de México estalló un levantamiento militar. Sin embargo, el gobierno domina la situación".[ 35 ]

México, 10 de febrero. Hay más información sobre las luchas de ayer: durante el día tuvieron lugar cuatro batallas separadas, de las cuales la más sangrienta fue la del palacio que terminó con la rendición de las tropas. Madero le comunicó a los representantes diplomáticos que no podría ofrecer ninguna garantía sobre la seguridad de los extranjeros ya que le era imposible distraer, para su protección, grupos de la policía o de las tropas de artillería, de los 2 000 ó 3 000 hombres con que cuenta.[ 36 ]

Washington, 10 de febrero. Según un telegrama, el coronel Vázquez, galardonado en Juárez por el propio presidente Madero, inició el levantamiento en dicho lugar el alba del domingo. La señal para iniciar la insurrección fue un cañonazo disparado a la salida del sol. Reportes periodísticos dicen que los cadetes de la escuela militar de Tlalpan, bajo el mando del coronel Juan Morales, muy de mañana avanzaron hacia la prisión militar y exigieron la liberación del general Reyes. La guarnición de la prisión -con efectivos de 100 hombres- se adhirió a los rebeldes; juntos avanzaron hacia el cuartel Ildefonso y, reforzados por las tropas allí acantonadas, se dirigieron al Palacio Nacional, donde llegaron a las 7:30 de la mañana. La petición de rendición fue contestada con fuego por el general Villar y Reyes cayó. Entre tanto, partidarios de [Félix] Díaz, bajo el mando del coronel Anaya, marcharon desde el suburbio de Tacubaya hasta la prisión federal para liberar a [Félix] Díaz. La guarnición de la prisión también se unió a los rebeldes al igual que casi toda la fuerza policiaca. [Félix] Díaz avanzó hacia el arsenal a las 11 horas y estableció allí su cuartel general. Pidió la rendición a Madero pero no recibió respuesta. Madero cabalgó a las 7:30 horas, desde el Castillo de Chapultepec hasta el Palacio Nacional; a medio metro de él cayó muerto un policía. La familia de Madero huyó a la embajada japonesa. En Washington se abrió un compás de espera. Taft discutirá hoy la situación en una reunión del gabinete. La prensa desaconseja la intervención, en caso de que se pueda eludir, pero aclara muy sencillamente, que la caída de Madero sería la mejor solución. Aquí, en general, aún están estupefactos.[ 37 ]

Washington, 10 de febrero. La huida de Madero no se ha confirmado. La junta del gabinete en la que se discutió la situación de México duró mucho, la decisión que se tomó no es conocida pero se da por seguro que cuatro barcos de guerra que iban rumbo a Centroamérica recibirán hoy órdenes de cambiar su rumbo hacia Veracruz y Tampico.[ 38 ]

Washington, 10 de febrero. Sobre el envío de los barcos de guerra hacia puertos centroamericanos, se aclaró que dicha medida de ninguna manera significa un cambio en la política [norte]americana.[ 39 ]

Washington, 11 de febrero. Félix Díaz le aseguró a un representante del New York Sun que está dispuesto a apoyar a cualquier candidato capaz. Por el momento desea evitar derramamientos de sangre. En caso de que Madero no renuncie abrirá fuego contra el Palacio Nacional. Las noticias oficiales se dan con cuentagotas. La prensa unánimemente abandona a Madero. Ningún aventurero político llegó nunca al poder bajo perspectivas tan favorables. Madero, en forma generosa, repartió los puestos más provechosos entre los miembros de su familia y, su actitud hacia Zapata y sus asesinos es poco firme [sic], por ello, en lugar de haberse atraído el respeto del pueblo se ha ganado su odio. Este desgraciado país debería estar feliz de deshacerse de él. México se encuentra hoy en las mismas condiciones de hace sesenta años y la situación amenaza convertirse en un peligroso anacronismo político. El gobierno [norte]americano debería prepararse para cualquier eventualidad.[ 40 ]

Nueva York, 11 de febrero. Desde la ciudad de México se informó que 6 000 hombres de las tropas federales ocuparon posiciones enfrente del arsenal. La lucha comenzará en cualquier momento.[ 41 ]

México, 11 de febrero. En lo esencial la situación del gobierno permanece igual a pesar de que 500 soldados del leal general Blanquet y un pequeño destacamento de rurales llegó a la capital. Entre tanto [Félix] Díaz podría, en caso de que el gobierno no tenga éxito, atraerse a los elementos indecisos y resistir un ataque merced a la superioridad que le brinda la artillería. Reina un orden extraordinaro. Todos los bancos están cerrados, la mayoría de las tiendas, así como las calles se encuentran vacías. Los tranvías reiniciaron el servicio. Madero se retiró al palacio donde conferenció con sus ministros. Su esposa se encuentra en Chapultepec. Madero confía en que el gobierno ganará la supremacía y cree que pronto contará con tropas suficientes para atacar con éxito a [Félix] Díaz. Los diplomáticos se esfuerzan en obtener el permiso para formar patrullas de extranjeros a fin de resguardar sus colonias, aunque sin éxito. El palacio está protegido por 800 soldados y 8 cañones. [Félix] Díaz aclaró que no tenía la intención de atacar, esperará el avance de las fuerzas gubernamentales, según parece cuenta con abundantes municiones y dinero. [ 42 ]

Berlín, 11 de febrero. El embajador mexicano recibió un comunicado del ministerio del Exterior (hoy al mediodía) en el cual se le informa que las noticias sobre la renuncia del presidente Madero son falsas. Los gobernadores de los estados permanecen fieles al gobierno, el cual domina la situación en la capital. Los rebeldes únicamente ocupan una ciudadela fuera de la ciudad.[ 43 ]

Texas, 11 de febrero. Informes recibidos aquí afirman que hoy en la mañana, a las 10:15 horas se inició una lucha callejera. Las tropas gubernamentales abrieron fuego en contra de los rebeldes. Las tropas del gobierno cuentan con artillería y ametralladoras. Cerca del Teatro Nacional se abrió el fuego de artillería contra los rebeldes cuyo número se eleva a 4 000. A las 11:15 horas las tropas leales al gobierno, bajo el mando del general Blanquet, atacaron el arsenal.[ 44 ]

Nueva York, 12 de febrero. De acuerdo con un informe procedente de la capital mexicana de ayer a las 16:00 horas, la lucha por el arsenal continúa. Los rebeldes se mantienen firmes.[ 45 ]

Nueva York, 12 de febrero. Desde la ciudad de México se informó que a los accidentes de mil especies ocurridos como consecuencia de la Revolución, también se incluye una inmensa destrucción de la propiedad privada, consecuencia del duelo de artillería pesada que sostuvieron ayer (lunes 10) en las calles de la capital las tropas federales y los rebeldes bajo el mando de Félix Díaz. En dicha lucha los rebeldes tuvieron claramente la ventaja. En una ocasión, con fuego de ametralladoras, barrieron a un destacamento de 200 rurales que intentaban emplazar una batería. Hoy se reanudará la lucha por ambas partes. Madero está todavía en el Palacio Nacional el cual se encuentra bien resguardado y será diestramente defendido. Sin embargo, de acuerdo con apreciaciones generales, las pérdidas de las tropas gubernamentales son mayores que las de los rebeldes. Como consecuencia el levantamiento se acrecienta.[ 46 ]

Santiago (California), 11 de febrero. El acorazado Colorado, buque insignia de la flota [norte]americana del Pacífico, con el contraalmirante Southerland a bordo, zarpó rumbo a Mazatlán. El almirante Southerland dirigirá los movimientos de los barcos [norte]americanos que operan en la costa occidental de México.[ 47 ]

Washington, 12 de febrero. En una conferencia sostenida hoy en la mañana en la Casa Blanca, en la cual participaron el presidente Taft, el secretario de Guerra, el de Marina y oficiales del ejército y de la marina, se acordó enviar hoy tres barcos de guerra más a la costa oriental de México. Además se ordenará que de inmediato se preparen dos buques transporte para trasladar tropas a México a fin de proteger a los [norte]americanos y otros extranjeros en caso de que empeore la situación en dicho país.[ 48 ]

[ 1 ] El presente trabajo fue posible gracias a las facilidades que me brindaron las autoridades del antiguo Centro de Investigaciones Superiores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (hoy Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social) para efectuar la búsqueda documental de julio a septiembre de 1974 en la Universitätsbibliotek de la ciudad de Düsseldorf (República Federal Alemana). En México, entre 1975 y 1976, trabajé el material en la sección de microfilmes de la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia de la ciudad de México. A todas las personas e instituciones que me ayudaron les doy las más cumplidas gracias.

[ 2 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 1156, el 17 de octubre de 1912.

[ 3 ] Publicado en la primera edición matutina del Kölnische Zeitung, número 1158, el 18 de octubre de 1912.

[ 4 ] Publicado en la primera edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 1158, el 18 de octubre de 1912.

[ 5 ] Publicado en la segunda edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 1159, el 18 de octubre de 1912.

[ 6 ] Publicado en la segunda edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 1159, el 18 de octubre de 1912.

[ 7 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 1160, el 18 de octubre de 1912.

[ 8 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 1160, el 18 de octubre de 1912.

[ 9 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 1174, el 22 de octubre de 1912.

[ 10 ] Publicado en la edición del medio día, del Kölnische Zeitung, n. 1174, el 22 de octubre de 1912.

[ 11 ] Publicado en la segunda edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 1117, el 23 de octubre de 1912.

[ 12 ] Publicado en la primera edición matutina, del Kölnische Zeitung, n. 1184, el 25 de octubre de 1912.

[ 13 ] Publicado en la segunda edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 1189, el 26 de octubre de 1912.

[ 14 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 1207, el 30 de diciembre de 1912.

[ 15 ] Publicado en la primera edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 1426, el 21 de diciembre de 1912.

[ 16 ] Publicado en la primera edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 1426, el 21 de diciembre de 1912.

[ 17 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 1453, el 30 de diciembre de 1912.

[ 18 ] Publicado en la primera edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 15, el 5 de enero de 1913.

[ 19 ] Publicado en la edición vespertina del Kölnische Zeitung, n. 35, el 10 de enero de 1913.

[ 20 ] Publicado en la edición vespertina del Kölnische Zeitung, n. 134, el 4 de febrero de 1913.

[ 21 ] Publicado en la segunda edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 140, el 6 de febrero de 1913.

[ 22 ] En el original dice Francisco Madero, confusión en los nombres que se repiten varias veces. Para la aclaración que al respecto publicó el Kölnische Zeitung, véase la nota 33 de este trabajo.

[ 23 ] Todo indica que el autor de este análisis es el mismo que escribió un artículo titulado "Panchito" publicado en el Kölnische Zeitung, en la edición del medio día, n. 626, el 3 de junio de 1911. Véase mi trabajo "El triunfo de Madero frente a la opinión pública alemana", Anuario de Historia, México, Universidad Nacional Autónoma de México, Facultad de Filosofía y Letras, año X, 1978-1979, p. 297-321.

[ 24 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 156, el 10 de febrero de 1913.

[ 25 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 156, el 10 de febrero de 1913.

[ 26 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 156, el 10 de febrero de 1913.

[ 27 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 156, el 10 de febrero de 1913.

[ 28 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 156, el 10 de febrero de 1913.

[ 29 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 156, el 10 de febrero de 1913.

[ 30 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 156, el 10 de febrero de 1913.

[ 31 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 156, el 10 de febrero de 1913.

[ 32 ] Publicado en la edición vespertina del Kölnische Zeitung, n. 157, el 10 de febrero de 1913.

[ 33 ] Publicado en la primera edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 158, el 11 de febrero de 1913.

[ 34 ] Publicado en la primera edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 158, el 11 de febrero de 1913. Después de este telegrama, a manera de aclaración, aparece la siguiente nota: "En el artículo 'La contrarrevolución en México' (número 156) desgraciadamente se confundieron los nombres Díaz y Madero. Porfirio Díaz, presidente de 1877 hasta 1911, fue derrocado por Francisco Madero quien, a su vez lo fue por el sobrino de Porfirio, Félix Díaz el domingo pasado. El organizador del dominio familiar de los Madero es Gustavo Madero, el hermano mayor del presidente Francisco Madero. Primo de ambos es Ernesto Madero, el hasta ahora ministro de Comercio".

[ 35 ] Publicado en la segunda edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 160, el 11 de febrero de 1913.

[ 36 ] Publicado en la segunda edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 160, el 11 de febrero de 1913.

[ 37 ] Publicado en la segunda edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 160, el 11 de febrero de 1913.

[ 38 ] Publicado en la segunda edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 160, el 11 de febrero de 1913.

[ 39 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 161, el 11 de febrero de 1913.

[ 40 ] Publicado en la primera edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 163, el 12 de febrero de 1913.

[ 41 ] Publicado en la primera edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 163, el 12 de febrero de 1913.

[ 42 ] Publicado en la segunda edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 164, el 12 de febrero de 1913.

[ 43 ] Publicado en la segunda edición matutina del Kölnische Zeitung, n. 164, el 12 de febrero de 1913.

[ 44 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 165, el 12 de febrero de 1913.

[ 45 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 165, el 12 de febrero de 1913.

[ 46 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 165, el 12 de febrero de 1913.

[ 47 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 165, el 12 de febrero de 1913.

[ 48 ] Publicado en la edición del medio día del Kölnische Zeitung, n. 165, el 12 de febrero de 1913.

Estudios de Historia Moderna y Contemporánea de México, Álvaro Matute (editor), México, Universidad Nacional Autónoma de México, Instituto de Investigaciones Históricas, v. 9, 1983, p. 301-342.

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